La gastritis en el perro se manifiesta de la misma manera que en los humanos. Es una inflamación del tejido que cubre el órgano afectado, el estómago. Es un trastorno muy molesto en los animales que requiere un tratamiento específico para sanar.
Causas y síntomas de gastritis en perros
Hay dos tipos de gastritis en el perro, la forma aguda y crónica. La primera ocurre de repente y tiene una duración corta, la segunda se produce lentamente y empeora con el tiempo, de hecho, tiende a convertirse en crónica y ser difíciles de erradicar. Las causas de esta enfermedad que atacan el estómago del perro se encuentran en:
- Tomando sustancias tóxicas
- Ingestión de plantas venenosas o cuerpos extraños
- Uso desproporcionado de drogas
- Los parásitos
- Infecciones causadas por virus y bacterias
- Enfermedades del sistema digestivo
La gastritis en perros se caracteriza por síntomas muy comunes, pero fácil de diagnosticar como vómitos, diarrea, dolor abdominal, pérdida de apetito, pelo sin brillo, sangre en las heces, la producción excesiva de saliva, el letargo y la mucosa amarilla. Los síntomas pueden ocurrir todos juntos o en grupos, dependiendo de la gravedad de la enfermedad.
Analizando el vómito del animal, esto aparecerá espumoso, con restos de sangre y rico en bilis. En presencia de úlceras gástricas, puede haber sangre tanto en el vómito como en las heces.
Aloe vera: cómo usarlo para contrarrestar la gastritis en perros
El tratamiento de la gastritis no es fácil, el tipo más fácil es ciertamente el más agudo, ya que no causa daños irreparables al estómago. La forma crónica en cambio tiende a deteriorar el estómago con el tiempo, causando un empeoramiento progresivo sin una resolución final.
El jugo de aloe vera es un remedio excepcional para contrarrestar la gastritis en perros. El gel es muy rico en nutrientes y ayuda a reintegrar el cuerpo que, en caso de inflamación en el estómago, no puede absorber todos los ingredientes activos presentes en alimentos crujientes o húmedos. Hay más de 75 nutrientes. Gracias a la consistencia del aloe cuando se toma desde el interior, el gel crea alrededor de las paredes del estómago una barrera protectora contra los ácidos del jugo gástrico. El aloe también actúa reduciendo la inflamación gracias a su capacidad para bloquear la síntesis de prostaglandinas y promover la cicatrización del tejido, lo que acelera el proceso de curación.
La dosis recomendada es de 1 ml de aloe por día tres veces al día. Puede dárselo al perro con una jeringa sin aguja, colocando la jeringa en las comisuras de la boca para que el animal se vea obligado a tragar.